Si estás pensando en vender o alquilar tu vivienda, necesitas disponer del certificado energético de tu propiedad. Este documento no solo es un requisito obligatorio desde 2013, sino que también ofrece información crucial sobre la eficiencia energética de tu hogar. Aquí te explicamos todo lo que necesitas saber para obtenerlo y cuánto te puede costar.
¿Qué es el certificado energético?
El certificado energético evalúa la eficiencia energética de un inmueble, calificado en una escala de la A (muy eficiente) a la G (muy deficiente). Proporciona información sobre el consumo de energía necesario para satisfacer la demanda energética del inmueble en condiciones normales de uso. Además, brinda recomendaciones para mejorar la eficiencia y reducir el consumo energético, lo que puede hacer tu vivienda más atractiva para compradores o inquilinos.
¿Es obligatorio?
Si. Tanto si vendes como si alquilas, debes disponer de este certificado. También se aplica a locales comerciales y edificios con más de 500 m² de superficie útil. Sin él, no podrás formalizar la venta o alquiler de tu inmueble. La normativa que regula esta obligación es el Real Decreto 235/2013.
¿Cómo se obtiene?
El proceso es sencillo, pero debe realizarlo un técnico autorizado que visitará su vivienda, evaluará aspectos como el aislamiento y los sistemas de calefacción, y registrará el certificado en el organismo competente de su comunidad autónoma.
¿Cuánto cuesta?
El precio puede variar entre 60 y 130 euros, dependiendo del tipo de vivienda y la zona. El resultado del estudio energético brinda un informe completo de la eficiencia energética del inmueble y la etiqueta correspondiente, necesaria para cualquier trámite asociado al inmueble.
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